viernes, 30 de diciembre de 2016

La Sexta acosa a HazteOir.org por denunciar las campañas totalitarias del lobby LGTBI

La Sexta acosa a HazteOir.org por denunciar las campañas totalitarias del lobby LGTBI

Conseguir la retirada de la campaña de publicidad ‘Vuelta al cole’ de El Corte Inglés y la publicación de #ElLibroQueNoQuierenQueLeas sobre las leyes de adoctrinamiento LGTBI, son los detonantes de la persecución a la que se está viendo sometida HazteOir.org.
 



Logos de La Sexta y HazteOir.org / Actuall
La cadena de televisión La Sexta está acosando a los miembros de la plataforma ciudadana HazteOir.org por denunciar las campañas totalitarias del lobby LGTBI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, personas Transgénero e Intersexuales).
Según ha explicado HazteOir.org en un correo remitido a sus seguidores, la cadena del Grupo Atresmedia está llevando a cabo una campaña de acoso y derribo contra la asociación por dos motivos fundamentales:

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El primero, la petición de HazteOir.org que consiguió la retirada de la campaña de publicidad ‘Vuelta al cole’ de El Corte Inglés que negaba el derecho de los niños a tener un padre y una madre;
y el segundo, la publicación de #ElLibroQueNoQuierenQueLeas sobre las leyes autonómicas de adoctrinamiento LGTBI.
Portada del libro '¿Sabes lo que quieren enseñarle a tu hijo en el colegio? Las leyes de adoctrinamiento sexual' editado por HazteOir.org / Actuall
Portada del libro ‘¿Sabes lo que quieren enseñarle a tu hijo en el colegio? Las leyes de adoctrinamiento sexual’ editado por HazteOir.org / Actuall
La petición ciudadana para retirar el anuncio de El Corte Inglés logró su objetivo ya que esta empresa, como cuenta HazteOir.org, “tuvo la sensibilidad de atender la protesta de miles de ciudadanos y retiró los anuncios” en los que se primaba la familia de ‘matrimonios’ homosexuales con hijos por encima de la familia natural.
El éxito de la campaña ciudadana tuvo una gran repercusión mediática, además de desencadenar una ofensiva en redes sociales por parte de activistas LGTBI.
#ElLibroQueNoQuierenQueLeas sobre las leyes autonómicas de adoctrinamiento LGTBI que ha editado y distribuido HazteOir.org ha provocado una virulenta reacción para “destruir” a esta asociación “de manera fulminante”.
Esta publicación, titulada ¿Sabes lo que quieren enseñar a tu hijo en el colegio? Las leyes de adoctrinamiento sexual reproduce textos literales de leyes, ya aprobadas y en vigor en varias comunidades autónomas, destinadas a destruir la familia y adoctrinar a los niños en los colegios a espaldas de sus padres.
Desde hace tres semanas equipos de La Sexta están apostados a las puertas de la sede de HazteOir.org en Madrid
La difusión de este libro ha ocasionado una ofensiva mediática y política sin precedentes por parte de organizaciones LGTBI.
Éstas pretendían introducirse en las aulas sin que nadie se enterara y, con el libro de HazteOir.org, miles de personas han sido informadas de lo que están tramando.
“Desde hace tres semanas varios equipos de La Sexta están apostados a las puertas de la sede de HazteOir.org en Madrid; se van relevando”, explica la asociación en el correo enviado a sus seguidores.
Y es que efectivamente, desde hace casi un mes varios periodistas de la cadena -cuyos mayores accionistas son los grupos Planeta y Berstelmann– llaman por teléfono constantemente, a menudo sin identificarse como periodistas, a  HazteOir.org para intentar obtener información sobre el funcionamiento interno de la plataforma ciudadana.
También acosan y graban por sorpresa a los trabajadores y a los voluntarios, interrogan a personas de otras asociaciones e importunan a todo aquel que quiere entrar en la sede. Fuentes de HazteOir.org aseguran que probablemente hayan entrado en las oficinas con cámara oculta.
El objetivo de este acoso, relata el correo, es obtener “declaraciones que van a manipular en un programa que esta cadena basura está preparando, destinado únicamente a hacer daño a HazteOir.org”.
El fin es “elaborar un reportaje en el que presentarán a nuestra asociación como un peligroso grupo casi ilegal de ‘facciosos corruptos’ que ataca la libertad de las mujeres, los niños y los homosexuales”.
En definitiva, La Sexta tiene previsto emitir un programa que desacredite ante la opinión pública a la plataforma ciudadana que se ha atrevido a plantar cara a los colectivos LGTBI.
Un socio recomienda a HazteOir.org “extremar el cuidado” ante la “imposición ideológica arbitraria”
En su correo, HazteOir.org comparte un mensaje que le ha hecho llegar uno de sus socios. Entre otras cosas, este ciudadano activo dice lo siguiente:
“Espero que estéis preparados para una persecución en toda regla. Os van a sacudir como a las alfombras sucias. Vais a sentir todo el peso del poder del lobby más importante del mundo. Habéis tocado el tema más tabú que existe en la actualidad.Habéis tocado un imperio que no le falta de nada: tienen dinero de sobra, dominada la política, a los profesionales de la psicología, las escuelas, y a hasta los jueces.
Y añade: “Cualquiera que les planta oposición es fulminado. Sabed que lo vais a pasar muy mal y que van a volcar todas las mentiras que puedan sobre vosotros. Es la Inquisición moderna, eso sí, muy progre. La ventaja es que te destruyen tu fama pero no te queman por fuera en una hoguera. Pero os van a intentar hacer pedazos”.
El socio recomienda a HazteOir.org “extremar el cuidado” ante la “imposición ideológica arbitraria”. “Sois el frente que da la batalla, la cara de muchos miles de familias que no queremos esta basura que propagan. Por eso no podéis dejar nada a la improvisación, nos jugamos demasiado. El derecho a educar a nuestros hijos, a disentir y a rebelarse contra la estupidez. Por favor, sed conscientes de la magnitud y de la importancia de la batalla”, añade.
HazteOir.org ha aprovechado su correo a socios y seguidores para dejar clara su postura ante la campaña de La Sexta: “No nos asustan, no van a callarnos, no vamos a retroceder un milímetro. Y aunque se querellen contra nosotros todas las organizaciones LGTBI de España y los gobiernos autonómicos, partidos y sindicatos que así lo han anunciado, seguiremos distribuyendo el libro que no quieren que leas para que se sepa lo que de verdad están inculcando a los niños en los colegios, de espaldas a sus familias”, sostiene la asociación.
Y concluye: “Te aseguro también que saldremos adelante una vez más y conseguiremos despertar en nuestro país la reacción que frene la intolerancia y el totalitarismo de quienes quieren callarnos”.
Y es que en España, aún en el siglo XXI, parece que enfrentarse a determinados ‘poderes’ no se perdona.
Desde HazteOir.org se recuerda que no es la primera vez que se denuncian este tipo de prácticas por parte de La Sexta.
Así ha sucedido, por ejemplo, con el periodista Hermann Tertsch, que en 2012 denunció cómo desde ‘El Intermedio’ se promovió que se le acosara en las redes sociales. De “agresión brutal” calificó el periodista la campaña de linchamiendo emprendida por El Gran Wyoming contra él en el programa televisivo.


http://www.actuall.com/familia/la-sexta-acosa-a-hazteoir-org-por-denunciar-las-campanas-totalitarias-del-lobby-lgtbi/
Más recientemente, recuerdan que el Partido Popular, a través de su portavoz parlamentario, Rafael Hernando, señaló a esta cadena por hacer de Rita Barberá, aún sin estar formalmente encausada o investigada, “un pim pam pum al que golpear” y de haber contribuido a que fuera “vilmente linchada”.






El gobierno panameño da marcha atrás en la creación de un organismo para políticas educativas de género

El gobierno panameño da marcha atrás en la creación de un organismo para políticas educativas de género

En declaraciones a Actuall, Tatiana Álvarez, miembro de la Fundación Vida y Familia: "El presidente ni entiende ni ha escuchado al pueblo, no tiene idea de que se trata esto, pero tampoco quiere ver su popularidad caer".
 




El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela / EFE
El Gobierno de Panamá anunció la noche del pasado 28 de diciembre que derogará un decreto, publicado apenas cinco días antes, que ordena la creación de una Dirección Nacional de Género y Desarrollo Humano dentro del Ministerio de Educación.
El organismo tendría como atribuciones implementar en el ámbito educativo las políticas públicas “en materia de género” emanadas no solo del gobierno nacional sino también de organismos internacionales.

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El artículo 4 del decreto determina como una de sus funciones “velar por el cumplimiento de los objetivos planteados las leyes […] internacionales sobre igualdad de género y desarrollo humano”.
El despacho firmado por el presidente de la República, Juan Carlos Varela Rodríguez, y publicado en la Gaceta Oficial el viernes 23 de diciembre, generó imediatas reacciones negativas.
Diversas organizaciones criticaron duramente que el mandatario adoptara esta medida cuando hay una intensa movilización ciudadana contra la educación sexual para niños y adolescentes implementadas por su administración.

Contener la presión popular

También cuestionaron, especialmente a través de las redes sociales, que el mandatario haya intentado hacer pasar desapercibida la creación de la nueva dirección al publicar el decreto en víspera de Navidad.
Menos de una semana después el Ministerio de Educación emitió un comunicado de prensa para informar “al país, que ante la preocupación derivada del decreto […]  se procederá a la derogación de dicho texto hasta que se haga una evaluación más detallada de sus alcances”.
Organizaciones pro familia esperan que la derogación del decreto se produzca tras el receso natalino para mostrar que el anuncio del Ministerio no fue solo una jugada para contener la presión popular
Y subraya que el objetivo de tal “suspensión” del acto presidencial es propiciar “una amplia e inclusiva consulta con distintos sectores para mayor convergencia sobre los diversos temas” cuestionados.
El comunicado fue divulgado a las 21 horas del miércoles 28 de diciembre y no hubo otro de tipo de comunicación oficial.
Organizaciones pro família locales esperan que la derogación del decreto sea debidamente oficializada después del receso natalino, al inicio del próximo año, para mostrar efectivamente que el anuncio del Ministerio no fue solo una jugada para contener la presión popular.

Una ley que viola la patria potestad

En declaraciones para Actuall, Tatiana Álvarez, miembro de la Fundación Vida y Familia, considera que “sin duda, la principal causa que llevó al gobierno, aparentemente, a dar marcha atrás fue la rápida e inesperada reacción ciudadana”.
“Creo que el presidente ni entiende ni ha escuchado al pueblo, no tiene idea de que se trata esto, pero tampoco quiere ver su popularidad caer”, explica.
Recientemente el gobierno fue testigo de la fuerte presión ejercida en la Asamblea Nacional a causa de la Iniciativa de Ley 61 que allí tramita y que pretende imponer educación sexual en las escuelas con la ideología de género.
El 13 de junio, tan sólo en la capital panameña, más de 100 mil personas se congregaron frente a la asamblea para expresar su rechazo al proyecto de ley por considerar que viola la patria potestad y la libertad de educación. En las diversas provincias del país también hubo marchas.
http://www.actuall.com/familia/gobierno-panameno-da-marcha-atras-la-creacion-organismo-politicas-educativas-genero/








«Hay obsesión por crear una sociedad postcristiana, odian la sociedad católica», dice Mayor Oreja

«Hay obsesión por crear una sociedad postcristiana, odian la sociedad católica», dice Mayor Oreja







30 diciembre 2016
«Hay obsesión por crear una sociedad postcristiana, odian la sociedad católica», dice Mayor Oreja
Jaime Mayor Oreja impulsa, con muchas asociaciones, la Plataforma por las Libertades
El presidente de la recién creada Plataforma por las Libertades, Jaime Mayor Oreja, ha concedido una entrevista al programa de Intereconomía TV El Gato al Agua en la que ha hablado de la ideología de género. "La ideología de género está diseñada para destruir los valores de nuestra sociedad. Hay una obsesión por construir una sociedad poscristiana, odian la sociedad católica", ha asegurado Mayor Oreja, que fue eurodiputado 10 años y ministro del Interior en el PP de José María Aznar.

"No es solo en España, no es solo la alcaldesa de Madrid: es un esfuerzo que se realiza desde hace tiempo, que está pasando desapercibido, desgraciadamente, y hace, en mi opinión, auténticos socavones en los cimientos de las sociedades occidentales", ha advertido.

"Ellos sueñan con reemplazar esos valores cristianos. En la sociedad líquida, con pocos valores, Naciones Unidas o el Europarlamento, donde he estado 10 años, quieren reemplazar la sociedad cristiana por una postcristiana. ¿Quién está detrás? Podría decir el dinero, o un grupo de personas con esa obsesión. La institución que más odian es la católica, universal. Y quieren sustituir esos valores por otros", añade después.

Algunas reacciones... pero no equilibradas
Mayor Oreja cree que últimamente cambia el escenario del relativismo porque hay algunos países y actores que lo quiebran: el Brexit, el proceso de paz de Colombia, Trump...

"A algunos no nos gusta el relativismo, tampoco nos gustan las reacciones extremas, y estamos huérfanos de ideas y valores cristianos". También ve reacciones en Francia, en Alemania... pero "no me gusta el extremo, querría ir a las raíces, a las raíces cristianas, que es una civilización, no es una religión estrictamente".

Crear corrientes de opinión
"El árbol de la nada da frutos de relativismo, lo políticamente correcto genera lo políticamente incorrecto; por eso, los que tenemos raíces cristianas tenemos la obligación de crear corrientes de opinión", exhorta.

Hablando de la Plataforma por las Libertades, El Gato al Agua ilustra la situación en los colegios con una grabación de las clases de doctrina transexual en un colegio del sur de Madrid (véase aquí el vídeo en La Contra). Y luego se pide al exministro que defina qué es la ideología de género.

"La ideología de género viene a decir que no hay hombres y mujeres. Lo del Génesis, de que Dios creó al hombre y la mujer, les estorba. Hay géneros -dicen- que puedes escoger a lo largo de tu vida. El derecho familiar español habla de Progenitor A y Progenitor B. Como decían Obama y Zapatero: 'la libertad os hará verdaderos'. Hacer lo que os dé la gana cuando os dé la gana, os va a hacer verdaderos. Por retorcida, es difícil combatir esta ideología. Enseguida, al que la critica le llaman homófobo. Inventan insultos con enorme facilidad".

"Estas ideologías de género, asegura, están condenadas al fracaso pero van a hacer mucho daño. Tenemos que ser perseverantes en nuestras ideas. Lo que hoy parece que es de unos pocos, será de muchos. Tenemos que ser perseverantes y leales", insiste.

Para combatir esta ideología y proteger las libertades frente a su imposición, docenas de asociaciones se han coordinado en la Plataforma por las Libertades con un manifiesto que se puede leer y apoyar aquí: www.plataformaporlaslibertades.org

http://www.actuall.com/familia/gobierno-panameno-da-marcha-atras-la-creacion-organismo-politicas-educativas-genero/






Género: Ideología o dictadura











Género: Ideología o dictadura

Por: Sergio Tapia
Estas reflexiones las dedico en memoria del sacerdote Juan Claudio Sanahuja, recientemente fallecido el 23 de diciembre en Buenos Aires. Un prócer en materia de denuncias sobre los orígenes siniestros de la ideología de género. Publicó diversos libros, cuyos títulos revelan originales perspectivas de la novísima dictadura de género: “El gran desafío, la Cultura de la Vida contra la Cultura de la Muerte” (1995), “El desarrollo sustentable” (2003), “¨Poder Global y Religión Universal” (2010, y 2016 edición post mortem), “El gran desafío” (2014). Asimismo fue promotor y editor del servicio de información, por vía electrónica, “Noticias Globales” desde 1998, dedicado al seguimiento y análisis de la gestación de los documentos que sobre género y en general la anti-vida elaboran los organismos internacionales, como la ONU y la OEA. Además, desde el 2001 editó “Notividas”, con similar contenido en relación a la producción legal y actuación política en la República Argentina.
El tema es de actualidad particular en el Perú, debido al inusitado empeño del presidente PPK, que con muy escasos meses de gobierno juega su estabilidad política y las condiciones de gobernabilidad. PPK lo apuesta todo, para imponer la ideología de género, mediante un plan educativo gestado desde hace años por el gobierno de su predecesor (el socialista Ollanta Humala).
Este afán de imponer a toda costa, de manera transversal en todo el currículo escolar, a los niños desde los 3 años de edad; revela la transformación de la ideología de género en dictadura político-cultural. Contra los artículos 1, 13 y 16 de la Constitución Política; PPK pretende dictar contenidos educacionales, tergiversando la sexualidad humana, contrariando la opinión de los padres de familia, el sentir mayoritario de la ciudadanía y la libertad de enseñanza de las instituciones educativas.
Las consecuencias son indeseables para la República, porque hiere sustancialmente la legitimidad del gobernante de turno. Además, de ser un peligro, pues, toda dictadura conlleva persecución y penalización en perjuicio de quienes se atrevan a disentir y resistir.
De otro lado, el género como clasificador de seres humanos, es una ideología. Porque es una múltiple equivocación: ontológica, antropológica, biológica, genética y moral. Es un error perversamente presentado como verdad. Igualito que el marxismo y el nazismo, ambas ideologías también.
Como toda ideología, es un reduccionismo de la verdad científica y de la comprensión metafísica de la realidad. Esto es la visión de género.
Parte de Europa experimentó la aplicación del cruel programa de transformaciones nazi, y lo penalizó universal e imprescriptiblemente. También el mundo ha sufrido –y algunos países aún lo sufren, entre ellos el Perú-, la inhumanidad de la imposición de la ideología comunista, que aún está a la espera de ser debida y convenientemente penalizada. Su demora se explica porque sus agentes aún controlan circuitos del poder mundial y nacional.
Ahora, el gobierno del presidente PPK se caracteriza, en sus inicios, por abanderar una revolución sexual. Lo que no estaba predicho, debido al perfil personal de PPK y a lo que prometió electoralmente.
Se predecía que la presidencia de PPK, obtendría rápida y eficazmente, la restauración del maltrecho aparato productivo multisectorial, estrepitosamente venido a menos gracias al gobierno socialista e incapaz de Ollanta Humala.
Pero, en economía la crisis sigue. Y, el gobierno le suma una conmoción socio-cultural con la ideología de género, aplicada dictatorialmente. ¿Y el Congreso, fiscalizador? De vacaciones, hasta marzo.
(*) Blog (colección artículos publicados en La Razón): http://sergiotapiatapia.blogspot.com/

https://larazon.pe/opinion/86197-genero-ideologia-o-dictadura.html/

El Gobierno valenciano pasa a la acción: formará a 450 profesores para imponer la transexualidad

El Gobierno valenciano pasa a la acción: formará a 450 profesores para imponer la transexualidad

Bajo el título "Construyamos entornos seguros e intervengamos ante el acoso escolar y la LGTBfobia", la consejería de Educación celebrará unas jornadas el próximo 28 de enero que tratarán, entre otros contenidos, sobre diversidad sexual e identidades de género.
 



El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig / EFE
El Gobierno de izquierda de la Comunidad Valenciana, presidido por Ximo Puig, pasa a la acción. En su proyecto de imponer la transexualidad  en las aulas, permitiendo que vayan con falda los chicos que se sientan transgénero, va a organizar unos cursos para adoctrinar a los docentes. 
La Consejería de Educación, Investigación, Cultura y Deporte de la Comunidad Valenciana organizará el próximo mes de enero las primeras “jornadas de personas coordinadoras de igualdad y convivencia”, bajo el título “Construyamos entornos seguros e intervengamos ante el acoso escolar y la LGTBfobia”.

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La jornada, que se celebrará el próximo 28 de enero, en la sala Nexus de la Universidad Politécnica de Valencia, está dirigida a coordinadores de igualdad y convivencia, equipos orientadores, equipos directivos, tutores y profesorado en general.
El número total de participantes será de 450 personas y la inscripción podrá realizarse en la página web de Formación del Profesorado de la Consejería de Educación hasta el próximo día 18 de enero.
En los cursos se explicará el nuevo protocolo de identidad de género en los centros educativos

Acoso escolar y “LGTBfobia”

La jornada será inaugurada por el consejero de Educación, Vicent Marzà, y en ella participarán como ponentes Joan Vaello Orts, psicopedagogo y profesor de la UNED; Blanca Torregrosa Díaz y María del Carmen Ferrández Marco, inspectora y asesora técnica de la Unidad de Atención e Intervención del PREVI; y José Ignacio Pichardo Galán, profesor asociado en el Departamento de Antropología Social de la Universidad Complutense de Madrid.
Por otra parte, entre los contenidos que se analizarán figuran recursos y propuestas para el tratamiento de la diversidad sexual y de identidades de género, así como recursos y propuestas de intervención ante el acoso escolar y la “LGTBfobia”, con la aplicación del nuevo protocolo de identidad de género en los centros educativos.
Del mismo modo, se abordarán diferentes protocolos de prevención e intervención ante casos de violencia de género y acoso escolar; propuestas y recursos sobre coeducación y para el tratamiento de la diversidad sexual y de identidades de género; herramientas y recursos necesarios para realizar un análisis coeducativo del proyecto del centro; y la elaboración de un proyecto de centro en clave de igualdad.
http://www.actuall.com/familia/el-gobierno-valenciano-pasa-a-la-accion-formara-a-450-profesores-para-imponer-la-transexualidad/











La cuestión del género, más allá de la irritación y del miedo, por José Luis Restán

La cuestión del género, más allá de la irritación y del miedo, por José Luis Restán





La cuestión del género, más allá de la irritación y del miedo, por José Luis Restán, director editorial de la Cadena COPE, en Páginas Digital (29-12-2016)
En un memorable artículo de hace pocas semanas, el expresidente del Foro de la Familia acuñaba el término “confesionalismo de género” para definir el conjunto de leyes que se están aprobando en las Comunidades Autónomas sobre la identidad sexual de las personas. Se trata, supuestamente, de combatir cualquier rastro de discriminación por motivos de orientación sexual, pero semejante pretexto no resiste un mínimo análisis. Afortunadamente nuestras leyes ya disponen de los instrumentos necesarios para proteger a las personas frente a esos abusos, que ciertamente han existido y deben ser completamente erradicados. De lo que se trata ahora es de imponer desde el poder político una determinada visión antropológica (la ideología de género), con una batería de coacciones que producen perplejidad y comprensible preocupación.
Lo sucedido estos días en el colegio Juan Pablo II de Alcorcón, cuyo director ha sido sancionado tras exponer severas críticas al contenido de la correspondiente ley en Madrid, y en Valencia, donde se amenaza a los padres que no reconozcan la identificación sexual expresada por sus hijos con ser denunciados por maltrato infantil, es solo una mínima consecuencia de la aplicación de este aparato jurídico delirante.
No estamos aquí ante una evolución social decantada de forma natural, fruto del debate libre o del desgaste de anteriores presupuestos culturales. Estamos ante una verdadera obra de ingeniería social ajena al sentir de la gran mayoría de la sociedad pero amparada en una férrea protección de los grandes centros de poder cultural (especialmente, aunque no sólo, los medios de comunicación), que han conseguido generar una auténtica espiral de silencio. De hecho, oponerse públicamente a los dogmas de la ideología de género implica en muchos casos poner en riesgo la propia carrera profesional o académica, así como afrontar un verdadero estigma social. Así se explica la cortina de silencio que rodea a un asunto en el que la inmensa mayoría de la gente no se siente reconocida, pero ante el que la mayoría prefiere ponerse de perfil.
La violencia (porque es propiamente una violencia) que se exhibe contra quienes disienten de esta nueva confesión forzosa sería inimaginable en cualquier otro campo de la vida civil. Pensemos, por ejemplo, en la dureza de las críticas a las leyes laborales, o las que se relacionan con temas de seguridad pública: como es natural en una sociedad pluralista el debate es muy vivo, y a nadie se le ocurriría condenar al ostracismo a quienes denuncian la reforma laboral o la ley de seguridad ciudadana.
http://www.revistaecclesia.com/la-cuestion-del-genero-mas-alla-de-la-irritacion-y-del-miedo-por-jose-luis-restan/






La Familia

La Familia















Este viernes la Iglesia celebra el día de la Sagrada Familia. Una Familia sencilla que fue luz y ejemplo de vida y amor y que estaba constituida por un padre carpintero, un trabajador  cualquiera de su época, una madre abnegada que se entregó, que lo dio todo para dar a luz a un hijo, que era Hijo de Dios y que ha sido el personaje histórico más relevante y quien es para los cristianos  la base de nuestra  Fe; una Familia corriente pero tan excepcional que ha sido elevada  a la categoría de Sagrada.
No quiero entrar en cuestiones de contenido teológico o religioso sobre la trascendencia de esa familia, sino sobre su significado como modelo de convivencia social. La familia de Nazaret representa lo que hoy en día detesta una corriente ideológica minoritaria pero que se ha ido imponiendo a golpe de desvergüenza, financiación y complicidad de políticos, jueces y medios de comunicación que rayan la estupidez más absoluta. La ignorancia, el oportunismo, los intereses espurios ocultos y el fanatismo ideológico han cimentado una cultura contraria a ese modelo tradicional de familia, que hoy se confundiría con la odiada imagen del heteropatriarcado machista.
Bien está que con talante de tolerancia democrática , que sólo predican pero no exhiben ni profesan quienes alardean de él,  se  admitan y respeten otros modelos de familia, pero desde luego lo que resulta un insulto a la moral y la inteligencia, es pretender excluir ese estandarte de familia que ha constituido la base de la cohesión social, y que se prolonga en una familia extensa en la que tienen protagonismo los abuelos, en un clima de solidaridad y apoyo mutuo, que ha  servido para superar las crisis más difíciles. Hoy en día, dejando al lado las discusiones de si Jesús  tuvo o no más hermanos, lo cierto es que para ese lobby de lesbianas o de género indefinido e indefinible, que quieren imponer su particular moral, el papel de María se tomaría como el de una mujer sumisa, esclava sexual de un poder machista dominador, y que además tuvo la osadía de reconocerlo al decir:” he aquí la esclava del Señor, hágase en mí según su Palabra”. Lo que  tendría que hacer una miliciana libertaria de hoy en día es haber denunciado a José por maltrato psicológico, al Ángel por acoso y a Dios por abusos, y eso sí, haber ejercido su derecho de libertad reproductiva acogiéndose a su derecho incuestionable al aborto. Y claro, justo después pedir una paguita.
Y yo me pregunto, ¿ese es  el modelo de mujer y familia desestructurada que queremos para nuestros hijos y  que vamos a permitir que se difunda en nuestras escuelas?. De momento lo estamos aceptando, a base de tragarnos ruedas de molino todos los días, disparates contra natura que estaban escondidos en el manual de esa ideología de género que se nos vendió como un avance en la lucha por la igualdad, y que en realidad lo que esconde es una obra bien planificada de ingeniería social en la que el objetivo es cargarse la cultura occidental, el modelo de familia tradicional de padre y madre con hijos y excluir el referente paterno en la crianza de unos hijos, que habría que delegar en la tribu de género, promoviendo el odio y la falta de identidad sexual de los individuos. Porque una persona sin identidad, sin referentes familiares y  culturales queda perdida en el limbo, en el vacío; un vacío que se encargaría de rellenar, a base de adoctrinamiento sectario, esa neocasta revolucionaria y transgresora que  ya ha contaminado una gran parte del ámbito universitario. Y eso sí, todo bajo el VB del PP.
Feliz día de la familia, y pido perdón a la mía, mi esposa e hijas, porque en el fondo tampoco predico con el ejemplo, y no les dedico, por razones de trabajo, todo el tiempo que se merecen y me reclaman.

http://xyzdiario.com/analisis/la-familia/







Duodécimo aniversario de la terrible “Ley de Violencia de Género”.


Duodécimo aniversario de la terrible “Ley de Violencia de Género”.

Carlos A. Caldito




La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso, y aplicar después los remedios equivocados… Marx (el otro Marx, “Groucho”)
Este 28 de diciembre, día de los Santos Inocentes en el santoral católico, se cumplen doce años de la aprobación de la ley más injusta, perversa, genocida,  de las aprobadas en España, y posiblemente en el mundo occidental en lo que va de siglo XXI. Una ley que ha conducido a la detención ilegal y al procesamiento, a lo largo de estos doce años de más de un millón ochocientos mil varones, por el simple hecho de haber nacido con pene.
Más del 15% del total de reclusos en las cárceles españolas lo son por aplicación de la Ley de Violencia de Género. Una norma que ha batido todos los récords de recursos de inconstitucionalidad -promovidos por jueces cuando se han visto obligados a aplicarla- hace ya mucho tiempo que se sobrepasaron los dos centenares; una norma que todos los juristas españoles de reconocido prestigio han afirmado que viola el derecho constitucional a la igualdad, el derecho a la presunción de inocencia, a la dignidad de la persona y a la tutela judicial efectiva, y muchas cuestiones más; cuestiones que a pesar del tiempo transcurrido, salvo los damnificados, sus familiares y amigos; la mayoría de la población española sigue ignorando, o ¿tal vez la mayoría de los españoles desea seguir ignorándolo?, y en tal caso, algo realmente grave, gravísimo está ocurriendo en España.

Estoy hablando de un ámbito en el que aquello de la corrupción, de la que tanto nos hablan los medios de información, un día sí, y el otro también, es lo más común, y para lo cual es imprescindible la entusiasta colaboración de jueces, fiscales, secretarios judiciales, abogados, forenses, psicólogos, “asociaciones de mujeres generosamente subvencionadas”, y un largo etc. que obtiene pingües beneficios del sufrimiento ajeno, principalmente de cientos de miles de varones, de sus hijos, de sus familias extensas; ya digo, un verdadero genocidio, crímenes de lesa humanidad.

La definición de crimen contra la humanidad, o crimen de “lesa humanidad”, está recogida en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, y comprende las conductas tipificadas como asesinato, exterminio, apartheid, deportación o desplazamiento forzoso, tortura, violación, prostitución forzada, esclavitud sexual, esterilización forzada y encarcelación o persecución por motivos políticos, religiosos, ideológicos, raciales, étnicos, de orientación sexual u otros definidos expresamente, desaparición forzada, secuestro o cualquier acto inhumano que cause graves sufrimientos o atente contra la salud mental o física de quien los sufre, siempre que dichas conductas se cometan como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque…

Ni que decir tiene que en algún momento habrá que solicitar, o mejor dicho exigir, que se cree un tribunal como el de Núremberg tras la segunda guerra mundial, para juzgar las responsabilidades de todos los implicados, empezando por los diputados y senadores que dieron su voto afirmativo a semejante canallada a finales de diciembre de 2004…

En España una de cada cuatro separaciones matrimoniales, o “de pareja”, va acompañada de denuncia por «malos tratos», y en las que no, la amenaza de denuncia suele estar presente.

Según la legislación aprobada por el parlamento español hace doce años, relativa a separaciones, divorcios, relaciones interpersonales, de pareja, etc. los varones españoles nacen “culpables” (algo así como el pecado original del que hablan los católicos) y se les somete a una sistemática discriminación en sus derechos esenciales, discriminación amparada en la denominada «perspectiva de género». Un nuevo fundamentalismo fanático, violento, el feminismo «de género» aliado con el poder político, está en el origen de todo ello, y el retroceso al que asistimos respecto de derechos fundamentales no tiene comparación posible en nuestro entorno cultural.

En junio de 2005 entraba en vigor en España la Ley Orgánica 1/2004, denominada «Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género», —más conocida como Ley de Violencia de Género—, tras los preceptivos seis meses desde su publicación en el Boletín Oficial del Estado. Una Ley sin precedentes en nuestro entorno democrático occidental, que legalizaba el linchamiento, la vejación sistemática, el escarnio y la condena de los varones, «por el hecho de serlo», en el ámbito de la pareja. Una terrible e injusta ley que impone penas distintas a hombres y mujeres por los mismos hechos, obviamente más duras y severas a los primeros que a las segundas; una ley en la que está implícita la presunción de culpabilidad para los varones españoles.

La Ley de Violencia de Género ha creado unos tribunales de excepción, encargados de juzgar –exclusivamente- a los hombres que son denunciados por las mujeres.

Estamos hablando de una ley que determina que en la práctica, todo, o casi todo es calificable como delito de «maltrato», si el sujeto activo es varón; y más desde que el Congreso de los Diputados en la actual legislatura, a propuesta del grupo neoestalinista “podemos”, aprobó su ampliación a cualquier circunstancia y en cualquier contexto en el que una mujer sea supuestamente maltratada por un hombre, aunque no haya ninguna clase de relación sentimental…

Todo al fin y al cabo es calificable como delito de «maltrato», pues la perversa y sexista ley invierte la carga de la prueba, y presupone la culpabilidad masculina; cuando un varón es acusado estará siempre obligado a demostrar, si es que puede (lo cual no es nada fácil, por no decir imposible), su inocencia; mientras tanto será considerado culpable.

Pero, es más, la LVIOGEN es una ley que además de injusta,  no ha acabado resolviendo nada, todo lo contrario ha acabado causando más y mayores problemas que los que supuestamente pretendía resolver, y está originando ingentes dosis tanto de desdicha privada —de dolor— como de desdicha pública: injusticia.

La LVIOGEN, ley de “violencia de género” de 28 de diciembre de 2004 es una ley que culmina el largo proceso de discriminación masculina «por cuestión de sexo» promovido por el fundamentalismo feminista en nuestro país. Porque hoy, para el aparato del Estado, el varón es un ciudadano de segunda en muchos aspectos de su vida. Hasta el extremo de negársele la propia condición de ciudadano, con la supresión de derechos fundamentales, como el derecho a la igualdad de trato o a la presunción de inocencia.

La primera cuestión de inconstitucionalidad a la Ley de Violencia de Género (de las más de 200 que se llegaron a presentar, algo único en la historia de la democracia española) la planteó en julio de 2005 una mujer, la magistrada de Murcia, María Pozas, al verse en la situación de tener que mandar a un hombre a la cárcel tras discutir con su esposa. La magistrada afirmaba que la imposición de penas distintas en función del sexo del agresor es clarísimamente inconstitucional, sin duda de ningún tipo, porque genera una situación de desigualdad penal por el mero hecho de ser hombre…

También los Fiscales de Violencia Doméstica fueron muy críticos con la norma, afirmando que en la «Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género» no debería incluir ninguna mención a la denominada «discriminación positiva» (…) por entender que ello implica la violación del art. 14 de nuestra Constitución: ya que la perversa ley, ante un mismo comportamiento, el hombre comete un delito y la mujer una falta (amenazas y coacciones) o, de ser delito para ambos (en los demás supuestos), al hombre se le impondrá un mayor castigo, lo que constituye una clara discriminación por razón de sexo, y una vuelta al derecho de autor a la manera de la Alemania Hitleriana. Todo ello siguiendo la línea de los pronunciamientos hasta entonces del Consejo General del Poder Judicial.

También, el Consejo General del Poder Judicial emitió un informe demoledor en contra del proyecto de Ley de Violencia de Género. Cualquiera que lea este texto, lo primero que se preguntará, será que ¿Cómo el Congreso de los Diputados pudo aprobar semejante engendro, conociendo el contenido del informe del Consejo General del Poder Judicial?

Pues existen poderosas “razones”, sorprendentes “razones” que lo explican.

Ninguna de las contundentes críticas, las advertencias, los rechazos, las opiniones contrarias a la Ley, provenientes de los organismos y personas más cualificadas de España en la materia, y también más directamente implicados con su realidad diaria, pareció afectar a los políticos, enzarzados en su particular lucha por conseguir el voto femenino.

La Ley de Violencia de Género fue una promesa electoral de Zapatero, pero lo que más llama la atención es la actitud del Partido Popular de traición a sus electores, que votó a favor en el Congreso, pese a que se opusiera a su contenido durante la tramitación. En el Senado, antes de la aprobación definitiva de la Ley, tras una complicada votación de enmiendas, donde el PP volvió a insistir sin éxito en la necesidad de modificar la ley para proteger a todas las víctimas de la violencia doméstica, y no solo a la mujer, todos los senadores acabaron apoyando el texto.

Ya, por entonces, existían mecanismos legales específicos contra los denominados «malos tratos en el ámbito doméstico» Sin embargo, la Ley de Violencia de Género surgió como respuesta política a los grupos de presión más influyentes, o a los que los políticos no deseaban contradecir, so pena de ser tildados de falócratas, machistas, misóginos, cómplices de los maltratadores, y lindezas por el estilo y “suicidarse” políticamente… Estamos hablando del feminismo de género, también llamado “feminazismo”.

La Ley de Violencia de Género es punta de lanza del fanatismo feminista, y un claro ejemplo del denominado «relativismo jurídico», cuando el Derecho no es un límite del ejercicio del poder, sino coartada para la acción política.

La Ley de Violencia de Género es una norma que aleja de la Constitución según las opiniones más cualificadas, pese a que el Tribunal Constitucional haya acabado avalando su aplicación, como no podía ser de otra forma. Porque un Tribunal Constitucional cuyos miembros son nombrados por el poder político –aplicando el sistema de cuotas- pierde la que debe ser su cualidad fundamental: la independencia. La Constitución debería estar por encima de cualquier pacto político que acabe traduciéndose en ley, incluso si tiene detrás un amplio consenso parlamentario, como el que se exige para aprobar una Ley Orgánica. Pero para que nadie pueda poner en duda la autonomía del máximo intérprete de la Constitución es imprescindible, también, que este último no dé la impresión, una vez más, de ser una mera institución comparsa de los partidos políticos y la infinita capacidad de éstos de generar polémica informativa y división social.

Una vez «legitimada» la Ley por parte del Tribunal Constitucional, por el estrecho margen de siete votos contra cinco, ya tendría vía libre para ser usada. A partir de entonces se pusieron en marcha los mecanismos penales del Estado, sin garantizar el respeto a los derechos fundamentales de la mitad de la población española. La Ley de Violencia de Género implica la posibilidad de ejercer violencia «legal» contra los varones, desde la total impunidad: no ha habido –que se sepa- hasta ahora ninguna mujer castigada con pena de prisión por denuncia falsa de maltrato contra su marido, novio, compañero… Impunidad, y también merma, desaparición de facto de la presunción de inocencia con rango de Ley, en la misma dirección que la “doctrina” del Tribunal Supremo, que ya en el año 2000, en una de sus sentencias acababa «de un plumazo» con la presunción de inocencia recogida en el artículo 24 de la Constitución:

En una sentencia sobre malos tratos, el Tribunal Supremo decidía que «basta el testimonio de la víctima aunque no haya otros testigos del hecho para fundamentar la condena contra el marido».

Desde entonces son –somos- cientos de miles los afectados.

Como algunos decían por entonces, la Ley de Violencia de Género era un texto «llamado a marcar una época». Y sin duda, desgraciadamente así ha sido. Una época que comienza con su aprobación en el Congreso de los Diputados en diciembre de 2004, y que continúa con los insólitos resultados de su aplicación, que marcarán un antes y un después no solo en el ámbito legislativo y judicial español sino, sobre todo, en el ámbito de las relaciones de pareja, es decir, de toda la sociedad.

Cualquiera que esté en contacto con la terrible realidad de las rupturas matrimoniales, los pleitos de divorcio, los pleitos por la custodia de los menores, los pleitos por la liquidación del régimen económico de gananciales, sabe hasta qué extremos la ley ha envilecido cualquier afecto conyugal.

Como ya apuntaba con anterioridad, alrededor del 15% de la población reclusa española sufre pena de prisión por aplicación de la Ley de Violencia de Género; por supuesto, todos varones, por definición de la propia Ley, que está incrementando de forma alarmante la cifra de personas privadas de libertad en un país donde tenemos, como triste récord, el índice de penados más alto de Europa. Aunque no seamos los peores, ni mucho menos. Tanto el índice español de delitos violentos como el de criminalidad «de género» se encuentran, con diferencia, entre los más bajos de Europa.

Desde la entrada en vigor de la Ley de Violencia de Género, hasta la actualidad, han sido procesados en España más de 1.800.000 hombres denunciados «malos tratos», de las que alrededor del 85% son denuncias falsas o abusivas, según el estudio llevado a cabo por el ex magistrado Francisco Serrano y algunos juristas de reconocido prestigio. En aplicación de la perversa ley, hasta la fecha es posible que se haya rebasado ya la cifra de 360.000 hombres condenados a algún tipo de medida penal. Y la mayoría de los denunciados sometidos al protocolo de detención «obligatoria» (incumpliéndose de forma sistemática el derecho constitucional al recurso de habeas corpus) ante la mera denuncia, y a una serie de medidas cautelares desproporcionadas, que van desde la orden de alejamiento a la salida inmediata del domicilio, la suspensión del régimen de comunicación y estancias con sus hijos, o la anotación de sus nombres en un registro central de maltratadores. Todo esto antes de haber sido juzgados y, generalmente, antes de haber sido siquiera escuchados.

Una vez calificado un varón como «maltratador», como delincuente, antes o después de ser juzgado, es susceptible de ser imputado por otros delitos de consecuencias mucho más graves, típicamente delitos contra la libertad sexual en el ámbito de la pareja o sobre los menores, e instruidos también por los juzgados de Violencia de Género, llegando así a ser víctima de un doble quebranto en su derecho constitucional a la presunción de inocencia. La presunción de veracidad que se otorga a la mujer lo convierte en presunto delincuente, con la mera acusación; y, de nuevo, se puede usar y abusar de esa presunción de veracidad. El «maltratador», pues, se convierte en presunto culpable de cualquier otro delito que se le desee imputar. Lo que puede conducir a una persona inocente a su destrucción como ciudadano y como individuo. Hasta tal punto alcanza la inseguridad jurídica que la Ley de Violencia de Género y la doctrina que la acompaña genera sobre la población masculina española, que algunos letrados han acabado denominando como «asesinato civil».

Pero, más allá de su realidad penal, la Ley de Violencia de Género también configura la realidad de la convivencia marital en España. Hoy, la regulación de las separaciones y divorcios está marcada, en una sociedad nihilista del «todo vale», por una Ley que bien parece dar respaldo legal a esta amoralidad. Las acusaciones por «malos tratos» planean sobre la mayoría de los procesos de separación, y muchos abogados se han especializado en introducirlos como elemento de presión. Con una simple denuncia, el expediente de separación pasa del Juzgado de Familia, civil, a Violencia de Género, penal.

Incluso sin denuncia, el uso torticero de esta Ley como instrumento de coacción influye, de manera determinante, en muchos de los acuerdos que se adoptan. El simple hecho de que exista la perversa y sexista Ley de Violencia de Género, genera una grave situación de desigualdad, y también de injusticia, un terrible drama, de enorme magnitud, cientos de miles de casos concretos, con nombres y apellidos.

Otro aspecto no menos grave, y de especial transcendencia e que la Ley de Violencia de Género también «regula» las relaciones de intimidad, introduciendo un factor de distorsión que desnaturaliza el sentido mismo del vocablo intimidad. Un concepto que solo puede existir si se fundamenta en la igualdad, la reciprocidad y la libertad de ambas partes.

Por otra parte, no cabe duda de que la ley no está funcionando. Tras casi diez años de aplicación la cifra de muertes de mujeres se sigue manteniendo en el mismo tono que el de los años previos a su aprobación y puesta en práctica.

Es importante señalar que la frase tantas veces repetida de, “no para de aumentar el número de mujeres muertas” y cosas por el estilo (amplificada hasta la saciedad por los diversos medios de información…) es una absoluta falsedad, pues como demuestran las estadísticas del Ministerio del Interior (y de la Asociación Unificada de la Guardia Civil, y del Instituto Nacional de Estadística…) el número de mujeres y hombres muertos en el ámbito familiar, se mantiene más o menos estable…

La teoría en la que se inspira la fracasada ley es que la violencia contra la mujer, los feminicidios, es la respuesta del “macho dominante” a los deseos de emancipación y libertad de la mujer. El varón apegado a formas de conducta ya periclitadas, el varón educado en la familia y la religión judeocristianas, en el patriarcado, que niega la autonomía de su pareja y a partir de un determinado límite resuelve el conflicto matándola.

Naturalmente, dado que es una ideología bastante chapucera, no existen datos que corroboren o apoyen tales hipótesis. Todo lo contrario. Si la hipótesis de la “perspectiva de género” fuera verdad, la violencia y, sobre todo, los asesinatos se darían en mayor medida en las personas educadas de forma más tradicional que en las personas jóvenes. Sin embargo, la tozuda realidad demuestra que las cosas no son así: la inmensa mayoría de homicidas son menores de 40 años, y el veinte por ciento menores de 30. Las homicidas mayores de 50 años, el grupo en teoría más peligroso por su supuesto “patriarcalismo”, apenas representan el 40 por ciento de los casos.

Si la teoría fuera cierta, las personas con mentalidad tradicional deberían cometer más homicidios que las más “liberales” o “progres”. Pero no es así. Las personas unidas por matrimonio religioso presentan una menor tendencia al homicidio que las unidas por matrimonio civil, y a su vez, éstas muchísimo menos que las que viven como pareja de hecho. Casualmente, las estadísticas demuestran que existen 10 veces más posibilidades de homicidio en una relación de pareja de hecho.

Si las afirmaciones de la perspectiva de género, que inspiran la ley fueran ciertas, los países “más liberales”, con una mayor tradición de emancipación de la mujer, como los países nórdicos y anglosajones, deberían poseer una incidencia mucho menor que los países de raíz tradicional y católica, como Portugal, España, Italia, Grecia (ortodoxa), incluso Irlanda. Pero no es así, sino todo lo contrario. Suecia tiene el dudoso honor de liderar el ranking junto con Gran Bretaña y los Países del Norte de Europa, mientras que la cola corresponde precisamente a los países mediterráneos e Irlanda.

El tópico-estereotipo de un presunto “macho violento” de pelo en pecho, color cetrino y mirada cejijunta frente a un rosado nórdico, de ojos azules y actitudes liberales, es falsa: el nórdico estadísticamente presenta una mayor tasa de feminicidios y, no sólo esto, sino también de violaciones.

La ley falla porque no ve que el origen de la violencia intrafamiliar está en la ruptura de pareja.

Existen tres factores (que a menudo se olvidan) que guardan una íntima relación con los feminicidios. Uno ya ha sido señalado, las parejas de hecho; el segundo es la inmigración desestructurada, sin familia (que no la inmigración a secas) y el tercero son los procesos de ruptura de pareja.

Pero en realidad estos tres factores se pueden resumir en un único factor: el que ya hemos nombrado de las rupturas, porque la inmigración desestructurada suele derivar en parejas de hecho y éstas presentan un grado de inestabilidad, de ruptura, por consiguiente, muchísimo más elevado que los matrimonios. De ahí también, que el aumento del número de divorcios tienda a presionar al alza el número de homicidios.

Pero la ley no quería abordar en profundidad el asunto porque resulta social y políticamente incorrecto señalar la ruptura como el factor de riesgo, porque lo importante era criminalizar al hombre-varón, y no buscar la causa real del por qué en unos casos concretos la violencia estalla mientras que en la mayoría no. Para la ideología de género es necesario que la violencia contra la mujer sea inherente al sistema y el feminicidio su corolario.

Y ¿qué hacer ante semejante panorama, por cierto nada halagüeño? Pues sencillamente, “más mediación familiar y menos policía, suprimir los juzgados de violencia de género y devolver al ámbito de la jurisdicción civil y penal este tipo de conflictos, tal como estaba antes.

Y ya para terminar: estamos hablando de un salvaje retroceso en lo que respecta a los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución Española de 1978, de la que hace pocos días celebrábamos su trigésimo sexto aniversario, que todos los días se le niega a la mitad de la población por haber nacido con pene; circunstancia que no es algo casual.

La liberticida y totalitaria Ley de Violencia de Género es la culminación de una ideología que se ha acabado instalando en la sociedad y goza de omnipresencia en las instituciones del Estado de Derecho. Una ideología que se llama feminismo de género, o feminazismo. Un régimen político, al fin y al cabo, que solo la “sociedad civil” puede derrocar, pues cualquiera que esté bien informado debe de  tener en cuenta que las soluciones no vendrán desde la esfera política. Solo la sociedad civil, con su reacción, puede impedir que lo «inverosímil» se adueñe definitivamente de nuestras vidas.

http://extremaduraprogresista.com/libre/40-libre-opinion/23687-duodecimo-aniversario-de-la-terrible-ley-de-violencia-de-genero







ESCOLTADOS POR UN FUNCIONARIO DE LA DICTADURA Los obispos cismáticos chinos votan por la continuidad

ESCOLTADOS POR UN FUNCIONARIO DE LA DICTADURA

Los obispos cismáticos chinos votan por la continuidad

En la novena asamblea general de la Iglesia cismática de China, cuyos obispos fueron ordenados sin permiso de Roma, Ma Yinglin y Fang Xingyao han sido reelegidos como presidentes del Consejo de los obispos y de la Asociación patriótica respectivamente.



(InfoCatólica) Según informa Asia News, la asamblea ha confirmado todos los principios, independencia y autogestión, que separan a los cismáticos de Roma, sin que se haya producido gesto alguno que haga pensar en un cambio del estatus quo.
Muy al contrario, en la asamblea participó Wang Zuoan, director de la administración estatal para los asuntos religiosos, quien aseguró que la dictadura espera que la Santa Sede sea «flexible y pragmática», o sea, que acepte la situación como es. Esa fue su respuesta a la declaración conciliadora vaticana difundida antes de la Novena Asamblea.
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=28157